El miércoles 21 de septiembre, en el Pabellón de La Araucanía de la ciudad de Temuco, se llevó a cabo el encuentro de cierre del estudio “La Huerta Mapuche, Antecedentes productivos y de usos asociados a la Biodiversidad Cultivada”, implementado por ONG CETSUR y financiado a través del Programa de Medio Ambiente de la Subdirección Nacional Temuco de CONADI.
El encuentro contó con la participación de 18 Lamien huerteras de las comunas de Lumaco, Purén, Cholchol, Nueva Imperial y Temuco, quienes compartieron con representantes de la Subdirección de CONADI; de la SEREMI de las Culturas, las Artes y el Patrimonio; de la SEREMI de Medio Ambiente; del Programa de Autoconsumo de la SEREMI de Desarrollo Social y Familia; de la Unidad de Medio Ambiente de la Municipalidad de Temuco, asesores técnicos del Programa PDTI de Temuco y Padre Las Casas, y el equipo técnico de ONG CETSUR.
“Hoy iniciamos el tiempo de los brotes, del Pewü, de la primavera, y nos encontramos para mostrarles, a través de los resultados del Estudio, como las Tukukawe o huertas mapuche son parte importante en la vida de las familias rurales e indígenas, no solo desde un enfoque productivo sino desde su aporte a la soberanía alimentaria, a la agroecología, a la autonomía económica de las mujeres y, principalmente, a su relevancia como el espacio en donde se preservan y transmiten saberes en torno a la preservación de la vida”. Indicó la Coordinadora Técnica del estudio y Vicepresidenta de ONG CETSUR, Sandra Parra Riquelme, quién también agradeció a cada una de las huerteras por su participación durante todo el proceso de la implementación de la iniciativa.
Por su parte, Hernán Muñoz Pedraza, Encargado de la Unidad de Medio Ambiente de la Subdirección Nacional Temuco, CONADI, destacó el trabajo realizado señalando que, “todo este trabajo, sin duda, contribuye a relevar la importancia de las huerteras y Curadoras de Semillas como poseedoras de conocimientos muy valiosos asociados a la biodiversidad cultivada y saberes locales”.
En este mismo contexto, la Lamien Ruth Painen Valenzuela de la comunidad Domingo Melin, de Nueva Imperial, agradeció a CETSUR “por visibilizar la huerta como un espacio nuestro, un espacio donde la mujer puede proveer de alimentos a sus familias. Este estudio realza la importancia cultural que tiene la huerta para nosotras y para el resguardo de las semillas que han sido traspasados por nuestras madres y abuelas”, además, instó a todas las instituciones presentes a seguir “formando lazos para continuar fortaleciendo la huerta de cada una de nosotras y de las mujeres de esta región”.
“El Equipo de ONG CETSUR agradece infinitamente a las 21 Lamien huerteras por abrirnos las puertas de sus huertas, para transmitirnos sus saberes y haceres en torno a estas y compartirlas con una sociedad que muy poco ha sabido valorar el trabajo de las mujeres rurales, campesinas e indígenas, en la preservación de la biodiversidad cultivada y la soberanía alimentaria del planeta en el pequeño espacio de sus Tukukawe”, agregó Sandra Parra, al concluir el encuentro.