En sintonía con la llegada de la primavera, el sábado 10 de septiembre ONG CETSUR abrió nuevamente las puertas de su Casa-Taller a la comunidad del Biobío, impulsando un espacio cultural permanente y cercano a la ciudad, bajo una atmósfera de reencuentro presencial junto a maestros/as de oficios, cultores y artistas, luego de dos años de cuarentenas restrictivas a causa de la crisis sanitaria Covid-19.
Conectar con los oficios tradicionales y las Artes de la Naturaleza desde la propia experiencia, fue el llamado que hizo la organización, poniendo a disposición de la comunidad tres talleres que invitaron a aprender de los saberes de maestros/as en culinaria tradicional, cestería en mimbre y agroecología, logrando convocar a 40 personas de distintas generaciones, provenientes de las comunas de San Pedro de la Paz, Concepción, Hualpén, Talcahuano, Penco, Tomé, y Nacimiento. Posteriormente, en la tónica de cierre y celebración por la jornada dedicada a elementos culturales que alimentan el buen vivir, toda la comunidad presente fue invitada a un recital-conversatorio en torno a la música y la guitarra campesina, junto a Patricia Chavarría, Milka Ramos y Felipe Ramos del Archivo de Cultura Tradicional.
“Es positivo que se rescaten y se abran estos espacios para poder fomentar y hacer crecer esta pequeña magia que es la cestería y que abarca demasiado. Yo en mis cuarenta años de experiencia nunca termino de aprender, por ejemplo, cada día me sorprende más la flexibilidad que tiene el mimbre”, explicó el artesano en mimbre David Mena.
En el taller “Cuidados de la huerta en primavera”, la Agroecóloga Glenda Rubilar compartió la preparación de jabón potásico, útil para el control de plagas y enfermedades en la huerta y bancales, señalando que “hoy en día el sostener un manejo limpio, sano y agroecológico de lo que estamos cultivando es muy importante, y cada vez hay más conciencia sobre lo necesario que es una alimentación sana y libre de químicos en la cual yo pueda confiar, donde lo que voy a consumir y lo que voy a aplicar en la huerta no va a generar ningún daño, a mí ni a la naturaleza”.
Asimismo, desde el taller ‘Masas dulces y saladas para el 18’, Leslie Retamal, rescató el interés que manifestaron los/as participantes por querer aprender en torno a las recetas tradicionales de los alfajores chilenos con harina dorada, las empanadas con harina en rama y el pebre con mote. Además, valoró la instancia en su totalidad. “Fue enriquecedora porque también es un trabajo que venimos haciendo desde hace años junto a CETSUR y que apunta a rescatar y visibilizar nuestra culinaria tradicional”.
Generar estos espacios de encuentro, donde se activen los diálogos e intercambios de saberes y experiencias relacionadas con el conocimiento tradicional, es para CETSUR una constante fuente de inspiración para continuar implementando iniciativas que contribuyan a la construcción de sociedades respetuosas de su diversidad cultural y conectadas armónicamente con la multiplicidad de sus territorios.